Dada las diferentes teorías que explican la formación de esta cavidad, el nombre más apropiado es «defecto óseo idiopático». Una de estas teorías es la impronta de la glándula submandibular en la cara lingual de la mandíbula. Se muestra una sialografía de la glándula submandibular, donde se aprecia como una rama de ella se ubica en esta cavidad.